Juan Grijalbo se destacó durante la Guerra Civil colaborando con la Generalitat de Cataluña y siendo promovido a delegado de la Generalidad en la Cámara del Libro de Barcelona. Tras la Guerra Civil se estableció en México dónde montó la editorial Atlante con un grupo de ex trabajadores de la editorial Labor y más adelante, ya en solitario, modificó su nombre y la llamó con su propio apellido: Editorial Grijalbo.
Se destacó con la publicación de textos marxistas aunque uno de sus mayores logros fue la de editar grandes best sellers, como, por ejemplo, El Padrino, uno de sus mayores éxitos.
En 1965 volvió a España dónde fundó con otros colaboradores la editorial Crítica en 1976. A principios de la década de 1990 vendió su editorial a Random House Mondadori, volviendo al mundo de la edición en 1991 cuando creó la editorial Serrés, dedicada a la literatura infantil y juvenil.
Falleció en Barcelona en 2002.